Sin embargo, el vicepresidente de la República, Elías Jaua, señaló que no se dejarán chantajear por las empresas afiliadas a Cavidea, y aseveró que "en este momento el Ejecutivo nacional no está considerando ninguna revisión de precios".
"No aceptamos el chantaje de Cavidea. No puede ser que ante una medida necesaria como fue la unificación cambiaria inmediatamente intenten chantajear al Gobierno y al pueblo con un incremento de más de 65%. Esos sectores saben que en esas condiciones el Gobierno bolivariano no va a sentarse a dialogar", indicó.
Dijo que para minimizar el impacto que tendrá la unificación del tipo de cambio oficial sobre las estructuras de costos de producción, el Gobierno reconocerá y liquidará a 2,60 bolívares por dólar todas las solicitudes presentadas a Cadivi antes del 31 de diciembre de 2010.
"Nosotros sí, y lo hemos demostrado, somos conscientes de la necesidad de la revisión de los precios pero no sobre la base del chantaje. Ellos verán qué hacen. El Gobierno bolivariano tiene muy claro qué es lo que va a hacer", expresó.
En ese sentido, Jaua señaló que el Ejecutivo está estudiando otras alternativas para contrarrestar el alza de los precios, pero no ofreció mayores detalles sobre dichas medidas.
Al ser consultado sobre la posibilidad de que se revisen los precios de los alimentos regulados en el primer trimestre, el funcionario señaló: "Estaremos revisando en los momentos de la importación" con el tipo de cambio a 4,30 bolívares.
En el caso de las importaciones de medicinas, el vicepresidente reiteró que "se están buscando muchas alternativas".
Descartó que el Ejecutivo quiera expropiar una cadena de farmacias para crecer en el ese ramo y aseveró: "No expropiamos por expropiar sino en justa aplicación de la ley cuando se comenten irregularidades".
El mercado
Ante el auge que registran las cotizaciones de las materias primas en el mercado internacional, el sector agroindustrial ha manifestado la necesidad de conocer, antes de que se ejecuten las primeras importaciones con divisas a 4,30 bolívares, cuáles serán las políticas que aplicará el Ejecutivo en materia de precios.
En algunos sectores, como los que producen alimentos derivados del trigo, el impacto de la devaluación en la estructura de costos ronda el 70%. Además, en el caso del pan y las pastas, los precios tienen 20 meses sin ser ajustados.
La industria de alimentos considera que reconocer a 2,60 bolívares por dólar las importaciones realizadas a finales del año pasado será un alivio para el sector durante el primer trimestre. No obstante, consideran que el Ejecutivo deberá sentarse con los distintos sectores para revisar las estructuras de costos y ajustar los precios de acuerdo a la nueva realidad del mercado interno.
El sector de alimentos ha garantizado que no habrá fallas de abastecimiento.
Fuente: El Universal
