En "cierre técnico" se
encuentran las empresas del país como consecuencia de la falta de materias
primas en insumos para producir ante las dificultades para obtener las divisas
necesarias para la importación.
Jorge Roig, presidente de
Fedecámaras, asegura que las compañías enfrentan una situación crítica, pues
aunque tienen las puertas abiertas, no pueden operar normalmente.
En los 30 días que tiene en
funcionamiento el Sistema Marginal de Divisas (Simadi), el acceso al sector
privado "estuvo absolutamente negado". "El mecanismo no arrancó
como se debía, por lo que esperamos que este haya sido un mes de prueba".
Indica que la oferta del Simadi
es insuficiente, pues hasta ahora todos los recursos los colocaron privados,
por lo que se requiere la participación inmediata del sector público.
En entrevista con La Verdad, Roig
agrega que las empresas tampoco reciben dólares del Centro Nacional de Comercio
Exterior (Cencoex) ni del Sistema Complementario de Administración de Divisas
(Sicad).
"No hemos podido importar
materias primas o insumos. Este año no hemos hecho ninguna compra importante.
Nuestros inventarios siguen cayendo".
El presidente de Fedecámaras
advierte que la situación más crítica la enfrentan las empresas de las áreas de
alimentos, químicos, metalmecánica, plásticos, envases y artes gráficas.
Deudas
Roig afirma que las deudas del
Gobierno con el sector privado sobrepasan los 20 mil millones dólares, de los
cuales 10 mil millones corresponden a divisas no liquidadas inicialmente por
Cadivi y ahora por el Cencoex y ocho mil
por pagos pendientes a proveedores y contratistas por servicios
prestados a organismos públicos.
Adicionalmente, el Ejecutivo
tiene cuentas por pagar por las expropiaciones de empresas realizadas en los
últimos 10 años, cuyos montos aún se están determinando.
Reclamos
Jorge Roig, presidente de
Fedecámaras, parte hoy a Ginebra (Suiza) para participar en una reunión de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Presentará sus reclamos por las
detenciones de empresarios por parte de las autoridades, que serán incluidos en
el caso 2.254 que lleva Fedecámaras desde hace ocho años por ataques contra el
sector privado.
Aunque para este mes estaba
previsto tratar el tema de Venezuela en la OIT, Roig solicitará que el asunto
se difiera para mayo para "evitar la politización" de los reclamos
laborales. "Entendemos las circunstancias políticas por las que atraviesa
Venezuela, donde el tema sobre las relaciones con EEUU tienen más
relevancia".