Yormaibeth Esparragoza Parra • feb 08, 2015 - 8:28 pm
Jorge Roig, presidente de Fedecámaras, indicó que la propuesta del sector incluye una economía mixta supervisada y no controlada.Cambiar el modelo económico actual es la premisa sobre la que se apoyan cada una de las propuestas que los empresarios venezolanos les sugieren al Estado como garantía para mejorar la economía del país, y sobre todo, para disipar las dificultades que enfrenta el sector.
Durante el programa Análisis Situacional el presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), Jorge Roig, describió ese modelo que aspiran los empresarios descrito en los siguientes ítems:
1. Supervisar y no controlador. La crítica al modelo actual, entre otros aspectos, está dirigida a los controles que persiguen a la iniciativa privada, preservan el poder en el Estado y actúan sobre la producción, como lo indicó Roig. Por ende, empresarios aseguran que el Estado debe eliminar estos controles y supervisar “cuando hay unas desviaciones que normalmente se producen en todos los mercados”, dijo el entrevistado.
2. Evitar excesos de desigualdades en mercados. Plantean una visión enfocada en reducir las desigualdades de los mercados, que contribuya a la eliminación de monopolios entendidos como aquellos mercados en los que existe sólo un productor o prestador de servicios. Asimismo, lo ideal para los miembros del sector es que se eviten los oligopólios, en los cuales un pequeño número de vendedores o servidores ejercen control sobre el precio de los bienes.
3. Privilegiar la libertad. Esta exigencia enmarca el deseo de empresarios sobre el disfrute de un modelo económico que “privilegie la existencia de las libertades desde todo punto de vista dentro de una ética comercial y moral”, explicó Roig.
4. Poner en práctica la racionalidad económica. El representante del gremio exige una mayor racionalidad económica con la que se separen las diferencias ideológicas de las prioridades económicas. Afirmó que actualmente esta cualidad los empresarios la practican, mientras que al Estado “le cuesta mucho” hacerlo.
5. Generar confianza y certidumbre. Roig reiteró que ningún sistema funciona sin la aplicación de estos. “Venezuela es un país para generar confianza si se abren las condiciones para que se reinvierta”, dijo al referirse a los venezolanos que residen en el país y a los que se fueron pero que, aseguró, “están ansiosos de volver” para invertir pero no lo hacen “por miedo”.
6. Incentivar la competencia, la iniciativa personal y la inversión privada. De esta manera se promovería nuevos actores económicos, siendo la oferta y la demanda enriquecedora para el consumidor, explicó el empresario. “Yo sueño con un modelo que te permita que tus ideas se conviertan en realidad y que un estado te acompañe a que eso suceda”, agregó.
7. Economía mixta. Los empresarios no rechazan una combinación entre lo público y lo privado, pero exigen quienes se encarguen de gerenciar “sean los mejores, preparados con una política que haga crecer a la empresa y no condenados a un socialismo que te amarre y no permita que los mejores vayan a donde tienen que estar”, explicó Roig.